Sacado de http://www.maikelnai.es/
"Prepárate para vivir las 24 horas del día” en el que se habla de un fármaco llamado modafinila. En realidad es un estimulante que fue lanzado hace siete años, y que desde entonces parece haber adquirido una reputación casi mítica para mantenerse despierto sin machacarte los nervios, sin provocar euforia y sin que finalmente llegue el típico bajón que se consigue con otros productos como la cafeína o las anfetaminas.
En el artículo, una usuaria del fármaco llamada Yves (aunque no es su verdadero nombre) afirma que lleva usándolo tres años y dice que es “tremendamente útil” y que se encuentra a si misma “más productiva en el trabajo” además de “más organizada y y motivada”
La modafinila, es una droga estimulante central y agente de primera línea para la somnolencia diurna y la narcolepsia, es eficaz para la fatiga y la somnolencia de los pacientes con esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson y distrofia miotónica. Y según el artículo, es solo la avanzadilla de una oleada de nuevos fármacos que prometen ser al control del sueño lo que la píldora anticonceptiva fue al sexo.
En el futuro, el ser humano por primera vez en la historia, podrá planificar su vida sin tener en cuenta los ciclos naturales noche-día. Según Russel Foster, biólogo circadiano del Imperial College de Londres: “cuanto más entendemos el reloj de 24 horas de nuestro cuerpo, más capaces somos de anularlo”. Y además añade algo que para él (y seguramente también para los amantes de la noche ibicenca) es un logro incomparable.
Russel Foster dice: “en 10 o 20 años seremos capaces farmacológicamente de librarnos del sueño. Imitar al sueño llegará un poco más tarde, pero creo que lo conseguiremos”. Foster se imagina un mundo donde sea posible, o incluso rutinario, que las personas se mantengan despiertas 22 horas al día, y duerman las otras dos.
Afortunadamente no estoy solo, un científico británico que también aparece en el artículo y que responde al nombre de Neis Stanley (jefe de investigación sobre el sueño de la Unidad de Investigación en Psicofarmacología Humana de la Universidad de Surrey) dice: “creo que esto sería lo más odioso que le podría suceder a la sociedad”, aunque admite, como la mayoría de los investigadores del sueño, que se trata de algo inevitable.
2 comentarios:
Don Jesús, leí los dos últimos posts, el antepenúltimo me pareció algo aburrido para leer del tirón :), pero los dos últimos son muy buenos.
Su crítica hacia la "esclavitud" es una realidad que se pretende disfrazar de algo bonito por parte del sistema. Yo cada día creo menos en las clases políticas y en los valores que se inculcan.
Si has echado un vistazo a mi blog habrás podido ver que debo de ser un tipo bastante frívolo que escribe de cosas muy tétricas. Si tiene la paciencia de seguirme verá que el final de la historia pretende dar un mensaje vitalista y profundo, pero ese final aún no llega, le quedan dos posts. En realidad me apena que los valores materialistas y la amputación de los principios religiosos se vayan imponiendo con cada vez más fuerza.
Una sociedad sin religión está condenada al fracaso, al egoísmo. Los valores de la ambición y de la competitividad se inculcan desde la más corta edad y eso pudre el impulso vital de la juventud y de la belleza.
Cooperación, solidaridad, espiritualidad y educación son pilares fundamentales que se encuentran hoy en día desquebrajados.
Bueno... ya veremos como se las apañan las generaciones futuras.
Con respecto al último post... qué quieres que te diga ¡no voy a permitir que me priven del placer de dormir!... hasta ahí hemos llegado. Eso lo dejaré para los ejecutivos o enfermos del trabajo.
Aunque al final... pasaré por el aro como todo el mundo.
vaya...he salido con el nombre del otro blog que tengo. Soy Parnasso, el asesino.
Hasta pronto
Publicar un comentario